Once ideal del Mundial

Manuel Neuer (Alemania / 7 partidos / 27 paradas): El portero más decisivo del mundial. Además de dominar el área con solvencia, dejó fabulosas intervenciones gracias a su lectura -el partido ante Argelia, el caso más evidente-, y sumó un excelente juego de pies para dar continuidad a la salida alemana.

Philipp Lahm (Alemania / 7 partidos / 2 asistencias): Lahm comenzó el torneo como pivote, dejando bastantes dudas, puesto que Alemania no terminó de ofrecer una transición pausada y un control que le hubiesen beneficiado en ese rol. Con el paso al lateral, Alemania comenzó a producir mucho más, a jugar con mayor soltura y a ser decisivo los días claves, haciendo una enorme semifinal y final. 

Thiago Silva (Brasil / 6 partidos / 1 gol): Complicado incluir en el once ideal del mundial a un defensa del anfitrión después de la debacle brasileña en el tramo final del torneo, pero precisamente ese partido contra Alemania, con su ausencia, da una imagen cercana de su influencia en el sistema defensivo brasileño. Su mundial, hasta los cuartos, fue intachable. 

Ezequiel Garay (Argentina / 7 partidos): Hubo varios defensas que dejaron grandes actuaciones -sin ir más lejos, puntuales de Hummels o Jerome Boateng-, pero Garay fue, quizá, de los más regulares. Argentina fue de más a menos en el torneo, pero el nuevo central del Zenit jugó con solvencia a lo largo de todo el torneo, incluyendo unos cruces a gran nivel. 

Marcos Rojo (Argentina / 6 partidos / 1 gol): El mundial de Rojo superó las expectativas. No hubo demasiado nivel en la posición de lateral izquierdo, incluyendo adaptaciones como la de Höwedes, y Rojo fue capaz de darle profundidad a su sector, ser poco concesivo en campo propio y hasta sumar en balón parado ofensivo. Estuvo muy serio.

Sami Khedira (Alemania / 5 partidos / 1 gol y 1 asistencia): El mejor funcionamiento colectivo del campeón fue con Khedira en el campo, y su ausencia en la final limitó varios recursos que Alemania venía mostrando. Su tremenda exhibición en la semifinal contra Brasil mostraron su influencia.

Javier Mascherano (Argentina / 7 partidos): El alma del subcampeón. Fue importante durante todo el torneo, pero su tramo final de campeonato fue fantástico. Sus correcciones, espíritu y nivel defensivo en la semifinal y final llevaron a la albiceleste a tener opciones hasta el último momento del torneo.

Arjen Robben (Holanda / 7 partidos / 3 goles y 1 asistencia): El jugador más autosuficiente de todo el torneo. Holanda preparó su plan en el orden y despliegues rápidos, y la influencia del futbolista del Bayern en un escenario así fue brutal. Desbordó con una facilidad tremenda y se hizo incontrolable para casi todas las defensas rivales. Jugó un mundial a un nivel altísimo. 

Leo Messi (Argentina / 7 partidos / 4 goles y 1 asistencia): La mayor pega para Messi fue que su rendimiento se apagó en los dos días clave: semifinal y final. En la fase de grupos y en el partido de octavos fue clave apareciendo para producir las jugadas que decantaron todos los partidos hasta entonces. 

James Rodríguez (Colombia / 5 partidos / 6 goles y 2 asistencias): Bota de oro del mundial, dejó en todos los partidos gotas de su enorme calidad, y marcó uno de los goles más bonitos del torneo. No obstante, quizá su mejor cara la ofreció en la derrota. Su partido de cuartos frente a Brasil fue una exhibición de calidad, pundonor y liderazgo. 

Thomas Müller (Alemania / 7 partidos / 5 goles y 3 asistencias): Quizá el mejor jugador del mundial por constancia, competitividad, lectura del juego y nivel de determinación. No falló en ningún partido, apareció para ofrecerle a su equipo lo que más necesitaba -en cuestiones tan distintas como producción de juego entre líneas, ofrecer profundidad o culminar jugadas- y siempre con gran tacto y enorme precisión. Jugó un mundial antológico. 

Entrenador: Louis van Gaal. Los Países Bajos llegaron a la cita con ciertas dudas, dada la convocatoria, repleta de jugadores jóvenes e inexpertos, y para muchos era incluso candidata a caer en la fase de grupos. Van Gaal logró darle forma a ese grupo de escasa experiencia internacional, hasta convertirlo en un bloque competitivo y que explotó las virtudes de sus mejores jugadores. Dejó, además, esa decisión para el recuerdo cuando Krul entró en lugar de Cillessen en la tanda de penaltis frente a Costa Rica. 

Análisis de partidos: Alemania 1-0 Argentina

1. Contexto y datos del partido

Final de la Copa del Mundo 2014. Alemania 1 (Götze) - Argentina 0

Datos del partido (Fuente: Squawka)

Alemania afrontaba el choque, anímicamente, en su momento más álgido de todo el torneo. Algo lógico teniendo en cuenta lo que significa pasar a la final, pero es que además los de Joachim Löw habían logrado ganar en semifinales a Brasil tras un histórico 1-7. Argentina, por su parte, no había tenido un episodio tan brillante, pero a cambio había logrado ir dejando, cada vez, mejores sensaciones. Es cierto que el pase a la final fue tras vencer en la tanda de penaltis a los Países Bajos, pero el combinado de Sabella ha conseguido, cada vez, tener mayor equilibrio y mejor rendimiento según ha ido avanzando el torneo. 

2. Planteamientos

Alemania mantuvo el once que jugó frente a Brasil en las semifinales, como no podía ser de otra manera, aunque el primer percance para Löw fue la lesión de Khedira en el calentamiento. Debido a ella, el futbolista del Real Madrid no pudo ser de la partida, y en su lugar entró Kramer. Así, Alemania formó con el 4-3-3, con Neuer en portería, Lahm como lateral derecho y Höwedes en el lateral izquierdo, y Boateng y Hummels completando la defensa como pareja de centrales. En medio campo, Schweinsteiger mantuvo su rol de mediocentro, con Kramer ocupando la posición de interior derecho, y Kroos la de interior izquierdo. Por delante, Müller volvió a jugar partiendo de la posición de extremo derecho, con Özil en el perfil izquierdo y Klose ejerciendo como delantero centro.

Argentina, por su parte, volvió a salir en el 4-4-2 que ha venido utilizando en todos los cruces del campeonato. Finalmente Di María no pudo recuperarse a tiempo, por lo que Enzo Pérez volvió a ser titular. Así, Argentina formó con Romero en portería, defensa compuesta por Zabaleta como lateral derecho, Rojo como lateral izquierdo, y pareja de centrales para Demichelis y Garay. En medio campo, Biglia y Mascherano se mantuvieron en el doble pivote, con Lavezzi de inicio en la posición de centrocampista por derecha, y Enzo Pérez en la misma línea pero en el perfil izquierdo. Messi, como segundo punta, e Higuaín, como 9, completaron el once. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Desde un principio, el partido fue bastante más abierto de lo que se podía presuponer en un principio Lo lógico, dada la exigencia y el poco margen de reacción que ofrece una final de la Copa del Mundo, hubiese sido ver un desarrollo inicial bastante más cerrado y con menos alternativas, pero en el choque comenzaron a sucederse opciones para uno y otro lado. El planteamiento argentino fue el esperado: un 4-4-2 con dos líneas de cuatro esperando en campo propio, y tratando de evitar que Alemania progresase con continuidad, quedando Messi e Higuaín sueltos para tratar de lanzar contragolpes. Y tanto Alemania como Argentina consiguieron producir cosas. Los alemanes supieron contrarrestar ese planteamiento que a Argentina le funcionó tan bien contra Holanda. Mientras que el combinado de van Gaal prácticamente solo contaba con Robben para producir opciones en campo rival, Alemania tiró de tres futbolistas que aparecían con bastante continuidad. Primero, Özil, que fue desde un primer momento el que más y mejor encontró recepciones entre líneas para ayudar al equipo a ser profundo, después, Lahm, que desde su posición de lateral derecho se sumaba con muchísimo tacto y también fue importante para ayudar a su equipo a llegar al área rival con peligro, y Müller, que en el tramo final de esa primera parte comenzó a aparecer tanto entre líneas como moviéndose en profundidad. Alemania ofreció 45 minutos de buen nivel. Enfrente, Argentina no tenía el dominio territorial, pero sí controlaba un espacio clave del que sacó muchos réditos: su perfil derecho. Allí aparecieron Lavezzi, Messi, y en alguna ocasión Higuaín, e hicieron mucho daño en la espalda de Hummels y Höwedes, que estuvieron lentos y concesivos. Los dos conjuntos tuvieron sus opciones en esa primera mitad.

En el segundo tiempo, Argentina comenzó a incrementar su producción ofensiva. Kramer se lesionó en el primer tiempo y Löw tomó la decisión de dar entrada a Schürrle en su lugar, con lo que cambió el esquema. Özil estaba siendo muy productivo en zonas interiores, por lo que Löw pasó a jugar en 4-2-3-1, dándole al futbolista del Arsenal más libertad para aparecer en zonas interiores. Esta variación quizá motivó a Sabella a cambiar en el descanso su dibujo, pasando del 4-4-2 a ese 4-3-1-2 en el que hay un centrocampista menos y un delantero más, tras la entrada de Agüero por Lavezzi. Eso provocó que los robos de Argentina tenían a Agüero siendo vigilado por Hummels, e Higuaín y Messi completamente pendientes de atacar esa espalda de Hummels - Höwedes, el gran punto débil del combinado alemán durante todo el partido. El segundo tiempo se movió en esa línea, con Alemania jugando más tiempo en campo rival, aunque esta vez sin ser tan productiva, al margen de alguna acción puntual de Lahm, y una Argentina dañando aún más en transición. Alemania se mantuvo viva gracias al fantástico partido de Jerome Boateng, que corrigió constantemente todas esas carreras argentinas que superaban a sus otros compañeros de zaga. Argentina produjo opciones, pero ninguno de sus puntas estuvo acertado en el remate, siendo decisivo, por supuesto, un impresionante Manuel Neuer. Al final, una fantástica jugada de Schürrle y una enorme definición de Götze acabaron dándole el mundial a Alemania en la prórroga. En resumen, partido de fútbol abierto, con opciones en una y otra portería, estando Alemania más acertada en ambas áreas.

4. Reacciones de los protagonistas

Joachim Löw (Fuente: AS): “Hemos estado durante 55 días concentrados. Empezamos con todo este proyecto hace diez años y este es el fruto del trabajo realizado. Hasta ahora avanzamos y por fin hemos dado el salto que nos faltaba. Hemos sido el mejor equipo en los siete partidos disputados y somos los primeros europeos en ganar en Sudamérica y en un país tan futbolístico como Brasil”.
 “Desde el principio sabíamos que no tendríamos sólo 11 jugadores, sino 23. Después habría situaciones para que todos pudieran aportar. Así ha sido en la final. Argentina estaba cansada y teníamos a gente fresca como Schürrle o Götze”.
“Götze es el chico milagro, siempre puede decidir los partidos. Le dije: ‘Muéstrale al mundo que eres mejor que Messi y que puedes decidir el Mundial’. Tenía una buena sensación con él”.
“Durante los últimos años hemos estado desarrollando nuestro propio sistema de juego. Los entrenadores que ha tenido el Bayern han mejorado a nuestros internacionales. España en los últimos torneos ha sido el equipo superior y pueden seguir jugando un buen fútbol. Sería un error decir lo contrario para nosotros”.

Alejandro Sabella (Fuente: AS): "Pienso que van a reconocer el esfuerzo. Los resultados siempre son secundarios, el equipo fue creciendo y hoy hizo un partido contra una gran potencia. En momentos fuimos superados, en momentos tuvimos situaciones".
“El partido tuvo sus vaivenes, con mayor posesión de Alemania, pero la mayor ocasión la tuvimos nosotros. Lo único que puedo hacer es felicitar a mis jugadores”.
“Son partidos parejos y cuando hay ocasiones hay que marcarlos. Nos faltó eficacia. El cambio de Lavezzi era una forma de ser más ofensivos y cambiar el partido”.
“Nos faltó definición hoy. Son partidos muy cerrados, finales, y cuando uno se equivoca y recibe un gol después es difícil darle la vuelta. Tuvimos nuestras chances y nos faltó eficacia. En líneas generales estoy muy orgulloso. Los muchachos hicieron un Mundial fantástico. Fue emocionante ver cómo lo dejaron todo”.
“Messi está en el Olimpo de los grandes, pero no de ahora, de siempre. El Mundial es un torneo que lleva a lo máximo en lo físico”.

Análisis de partidos: Argentina 0-0 Países Bajos

1. Contexto y datos del partido

Partido de semifinales. Argentina 0-0 Holanda. Victoria de Argentina (4-2) en la tanda de penaltis.

Datos del partido (Fuente: Squawka)

Argentina afrontaba el choque después de haber eliminado a Bélgica en los cuartos de final. La albiceleste ha venido creciendo a lo largo del torneo, y frente al combinado de Wilmots mostró tramos bastante sólidos, incluido un tramo final en el que supo resolver con solvencia la ventaja en el marcador. Holanda, por su parte, llegaba a las semifinales después de haber sufrido muchísimo frente a Costa Rica, solventando el choque en la tanda de penaltis, con Krul como protagonista. 

2. Planteamientos

Alejandro Sabella mantuvo el 4-4-2 que había utilizado en los octavos y los cuartos, desde la baja de Agüero. La ausencia de Di María fue cubierta por Enzo Pérez, que ya jugó frente a Bélgica desde la lesión del futbolista del Real Madrid. Argentina formó con Romero en portería, Zabaleta lateral derecho, Rojo lateral izquierdo, y Demichelis, que volvió a dejar en el banquillo a Fede Fernández, acompañó a Garay en el centro de la defensa. Por delante, Sabella repitió con el doble pivote Mascherano-Biglia, con Enzo Pérez como volante derecho, Lavezzi como volante izquierdo, y Messi liberado por detrás del 9 del equipo, que volvió a ser Gonzalo Higuaín.

Lois van Gaal, por su parte, volvió a introducir ligeras variaciones. Si frente a Costa Rica en los cuartos de final eliminó a uno de sus hombres de medio campo para dar entrada a Depay, contra Argentina regresó a los tres centrocampistas, tras la alineación, sorprendente dada la pronta recuperación -se le daba por baja para todo el torneo- de Nigel de Jong. Así, Holanda formó con defensa formada por Cillessen en portería, línea de tras centrales compuesta, de derecha a izquierda, por de Vrij, Vlaar y Martins Indi, y carrileros para Kuyt -derecha- y Blind -izquierda-. En medio campo, Nigel de Jong entró como mediocentro, con Wijnaldum acompañándole como interior derecho, y Sneijder ejerciendo de interior izquierdo. La delantera fue para Robben y van Persie. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El partido se movió en un ritmo bajo y bastante cauteloso por parte de los dos equipos. Argentina pretendía que la pelota la tuviera Holanda, aunque lejos de su portería, mientras que la selección europea asumía esa responsabilidad pero sin arriesgar en ningún momento la posesión, buscando asegurar el pase de forma lateral y prácticamente sin batir línea en ningún momento. Argentina se organizaba muy bien en ese 4+4, y no permitió en ningún momento a Robben o van Persie recibir con cierta ventaja a la espalda de su doble pivote, e incluso tampoco permitió alguna recepción con cierto espacio en los costados para que llegase algún desborde en esa zona exterior. A partir de esa buena organización en defensa, Argentina tuvo en su banda derecha una clara ventaja para ganar profundidad, tanto con esos robos que conseguía en campo propio, como en salida de pelota. Martins Indi - Blind no se ajustaron bien, y Enzo Pérez comenzó a tocarla con mucha ventaja entre ambos. A partir de ahí, el del Benfica consiguió empezar a enviar pelotas profundas, bien sobre Higuaín o bien buscando a Messi entre líneas, y Argentina comenzó a producir cosas. Sabella vio que allí había una ventaja clara, y mandó a Lavezzi a aquel costado para intentar ganar metros de una manera más directa. Lavezzi intimidaba el espacio, pero a Argentina le faltaba quizá algún escalón intermedio. Ya, sin Enzo Pérez en aquel lado, no había una recepción que atrajese rivales, y esa vigilancia de de Jong sobre Messi y las persecuciones de Vlaar a los desmarques de Higuaín se hicieron mas efectivos. Así se llegó al descanso, con 0-0 pero con una selección argentina mostrando mejores sensaciones. 

Van Gaal vio que Holanda tenía ahí una debilidad evidente, y en el descanso retiró a Martins Indi para dar entrada a Janmaat. Con ese cambio, Blind pasó a ser central izquierdo, y Kuyt carrilero en ese perfil. Argentina dejó de profundizar con tanta facilidad por su banda derecha, y por lo tanto la sensación de dominio albiceleste descendió. Argentina siguió controlando bien a Robben, pero dejó de tener tanta profundidad, mientras que Holanda cerró el grifo y mantuvo las vigilancias sobre Messi, incluso después de que de Jong se retirase para dar entrada a Clasie. El partido, hasta el final, se movió en esas constantes buenas acciones defensivas -con Mascherano destacando de un lado y Vlaar de otro- y con ambos equipos teniendo claro que no iban a asumir un riesgo que permitiese a alguno de los dos cracks rivales tener espacio para correr. En esa dinámica se fue consumiendo el tiempo hasta llegar a la tanda de penaltis. En resumen, choque con desarrollo lógico llegados a este punto; dos equipos temerosos a la hora de cometer algún error, que enfocaron su planteamiento en no permitir el más mínimo espacio a alguna de las dos estrellas rivales. Al final, los penaltis, con un Romero más competitivo que Cillessen, decidieron que Argentina sería el rival de Alemania en la final. 

4. Reacciones de los protagonistas

Alejandro Sabella (Fuente: AS): "El partido fue durísimo. Quizá nosotros tuvimos más ocasiones de hacer gol, pero acabamos en empate. Estoy muy satisfecho con los jugadores. Hicimos un grupo fuerte y ahora se notan los frutos".
"Mascherano es un jugador que lo da todo y ha estado estupendo. Todos los entrenadores que ha tenido se lo han querido llevar. Benítez, Guardiola, todos. Eso es por algo".

Louis van Gaal (Fuente: AS): “Si hubiese tenido la oportunidad de sustituir a un jugador lo hubiera hecho pero ya había hecho los tres cambios y no podía hacerlo”.
 “En general no me interesa lo que dice la gente sobre mi o mi equipo. Si es positivo es bueno pero de los que se trata es que hay que anotar un gol más que el contrincante. No creamos mucho como otros días. Eso dice algo de Argentina y también de nuestra organización. Ellos no nos crearon oportunidades. Hubo equilibrio. A pesar de todo lo que tienen arriba no crearon ocasiones. Fue un partido táctico”.

Análisis de partidos: Brasil 1-7 Alemania

1. Contexto y datos del partido

Partido de semifinales. Brasil 1 (Oscar) - Alemania 7 (Müller, Klose, Kroos x2, Khedira, Schürrle x2)

Datos del partido (Fuente: Squawka)

Brasil llegaba al choque después de haber eliminado a Colombia en los cuartos de final. Sin duda, toda la previa estaba condicionada por la lesión de Neymar, que apartaba a la gran estrella canarinha de lo que quedaba de mundial, además de la baja por sanción de Thiago Silva, el mejor defensor brasileño. Dos ausencias que habían copado los titulares en los días que precedieron al encuentro. Alemania, por su parte, llegaba tras derrotar a Francia en su choque de cuartos, y lo había hecho dejando la sensación colectiva más sólida en lo que iba de mundial, tras las modificaciones que Löw hizo para el partido.

2. Planteamientos

Scolari tenía que plantear la semifinal de la Copa del Mundo con las dos bajas más relevantes que podía tener una vez empezado el campeonato: Thiago Silva, su mejor defensa, y Neymar, su mejor atacante. Dante y Bernard fueron los elegidos para sustituirles. Brasil formó con el 4-2-3-1 habitual, con Julio Cesar en portería, defensa compuesta por Maicon como lateral derecho, Marcelo como lateral izquierdo, y David Luiz - Dante como pareja de centrales. En medio campo, Luiz Gustavo regresaba después de su sanción en los cuartos, y entró en el once, acompañado en el doble pivote por Fernandinho. En la derecha entró Bernard, con Hulk en izquierda manteniendo su posición habitual en el torneo, mientras que Oscar pasó a jugar como enganche, en el rol habitual de Neymar. El 9 del equipo fue nuevamente Fred.

Joachim Löw, por su parte, mantuvo el once que vimos en cuartos contra Francia, con la variante de Lahm como lateral derecho, que había lavado la cara a Alemania. Así, la selección alemana formó con el 4-3-3 que está utilizando en el mundial, con Neuer en portería, Lahm lateral derecho, Höwedes lateral izquierdo, y pareja de centrales compuesta por Jerome Beoteng y Hummels. En medio campo, Schweinsteger jugó como mediocentro, con Khedira como interior izquierdo y Kroos en el perfil izquierdo. Por delante, Müller repitió partiendo de la derecha en la última línea, con Özil en banda izquierda y Miroslav Klose como delantero centro. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Es complicado abordar el partido desde un punto de vista analítico puesto que a partir del 0-2 la debacle brasileña tuvo mucho más que ver con el componente emocional. Hasta ese momento, eso sí, Alemania enfocó el choque de tal manera que comenzó a encontrar ventajas de forma constante. Brasil saltó al terreno de juego con la intención, como viene siendo habitual, de ser muy agresiva, robar a la máxima altura posible y establecerse en campo rival. Esta vez duró únicamente unos minutos, el tiempo suficiente para que Alemania terminase una jugada y pudiera poner en práctica su planteamiento. Los de Löw trataban de ensuciar la salida brasileña, robar, y machacar con un despliegue rápido y preciso. Brasil intentó no perderla en esa salida, y durante el primer cuarto de hora prácticamente todos los inicios de jugada desde atrás eran pelotas largas buscando a los dos extremos; Hulk y Bernard. Brasil no producía demasiado, pero al menos no ponía en riesgo la portería de Julio Cesar.

Todo cambió cuando Alemania encontró el 0-1, después de una buena jugada de estrategia, en la que Kroos sirvió una fantástica pelota a Müller en un córner. A partir de entonces ese plan comenzó a tomar efectividad. El hombre de la primera parte fue Sami Khedira. Se encargaba de adelantar su posición para limitar las recepciones de Luiz Gustavo, e incluso subía metros para apretar a Dante. El marcador en contra hizo que Brasil quisiera rifar menos el balón, y los pases intermedios empezaron a matar a la canarinha. Los robos alemanes cogían a la defensa brasileña desubicada, y esa era la gota que colmaba el vaso para los precisos toques germanos de cara a terminar esas jugadas. Entre Khedira, Kroos, Müller, Özil y Klose los alemanes machacaron a Brasil con robos altos y transiciones fugaces y precisas. En apenas siete minutos desde el 0-1, Alemania se había puesto 0-5 y comenzaba a escribir la historia de uno de los partidos más impactantes en toda la historia de la Copa del Mundo. A partir del segundo tiempo Alemania bajó esa intensidad a la hora de querer robar en campo rival, pero aún así seguía teniendo opciones gracias a los despliegues de Lahm, Müller y la entrada de Schürrle. Con una Brasil absolutamente descompuesta anímicamente, y unos alemanes a los que les salía todo, el marcador se fue hasta ese 1-7 definitivo. En resumen, vivimos un partido absolutamente histórico, al que Alemania entró tácticamente con las ideas más claras, llevadas a cabo de forma brillante, pero que estuvo absolutamente condicionado por esa debacle anímica que tuvo el anfitrión a partir del 0-2.

4. Reacciones de los protagonistas

Joachim Löw (Fuente: fifa.com): "Después de caer en semifinales ante Italia en 2006, sabemos cómo se siente Brasil, sus jugadores, el seleccionador Scolari y sus aficionados, así que tenemos que ser modestos y humildes y pensar en el siguiente partido. Son emociones muy intensas. Hemos ganado, nos hemos metido en la final. Hemos superado la pasión de los brasileños. Sabíamos que si jugábamos al máximo de nuestro potencial, teníamos posibilidades de ganar.
"Pero jamás habríamos esperado un resultado como éste. Aprovechamos nuestras ocasiones y ellos se sintieron más presionados a raíz del primer gol. Tanto Argentina como Países Bajos poseen unas cualidades formidables, y seguro nos plantearán un partido complicado. Significa mucho para nosotros que Miroslav Klose haya batido el récord de máximo goleador en la historia de los Mundiales. Es una gran noticia para él y para todo el equipo. Es un logro que sólo puede obtenerse a base de mucho trabajo. Klose sigue jugando al mejor nivel y marcando goles".

Luiz Felipe Scolari (Fuente: fifa.com): "Es el peor momento de mi carrera y el peor día en mi vida futbolística. Pero la vida sigue. ¿Quién es el responsable de este resultado? Yo, soy yo. Podemos repartir la culpa de este resultado catastrófico entre todos nosotros, pero la persona que decidió la alineación y el sistema fui yo. Fue mi decisión. Hicimos lo que pudimos, lo dimos todo, pero jugamos contra una grandiosa Alemania. No supimos reaccionar al vernos por detrás en el marcador. El equipo perdió el orden y nos entró el pánico después de conceder el primer gol.
"A partir de ahí, todo nos salió mal. Ni siquiera los alemanes sabrán decir qué ha pasado, pero ha sido mérito suyo y debemos respetarlo. Tendremos que aprender a sobrellevarlo. Mi mensaje para el pueblo brasileño es el siguiente: Por favor, discúlpennos por esta actuación. Siento que no hayamos sido capaces de llegar a la final, pero ahora intentaremos acabar en tercera posición. Todavía tenemos un objetivo por el que luchar".

Análisis de partidos: Países Bajos 0-0 Costa Rica

1. Contexto y datos del partido

Partido de cuartos de final. Países Bajos 0 - Costa Rica 0. Victoria de los Países Bajos (4-3) en la tanda de penaltis.

Datos del partido (Fuente: squawka)

La selección holandesa llegaba a cuartos tras ganar en los últimos instantes de partido su choque de octavos frente a México. Los de van Gaal dejaron dudas durante, aproximadamante, una hora de partido, pero en el tramo final produjeron bastantes ocasiones hasta darle vuelta al resultado. Costa Rica, por su parte, luchó con uñas y dientes frente a Grecia, manteniendo el 0-0 a pesar de jugar una hora con un jugador menos, y logrando el triunfo en los penaltis. 

2. Planteamientos

Louis van Gaal hizo algunas modificaciones en su 5-3-2 habitual, ya que prescindió de un centrocampista para meter a Depay, que actuó en la última línea del equipo. Además, el buen rendimiento de Kuyt como carrilero hizo que entrase directamente en derecha, siendo suplentes Janmaat y Verhaegh. Holanda formó con un 3-4-3, con Cillessen como portero, y manteniendo, eso sí, la línea de tres centrales, con de Vrij en derecha, Vlaar en el centro y Martins Indi en izquierda. Kuyt ocupó la posición de carrilero derecho, mientras que Blind se ocupó del perfil izquierdo. En medio campo, la principal variación. Doble pivote con Wijnaldum más fijo, y Sneijder de acompañante. En la línea de delanteros, Robben partía como extremo derecho, aunque de inicio tenía mucha movilidad, con Depay en la izquierda y van Persie en la posición de delantero centro. 

Jorge Luis Pinto no hizo modificaciones importantes en Costa Rica, salvo la obligada de Acosta en lugar del sancionado Duarte, y un cambio de posiciones entre Bryan Ruiz y Joel Campbell. Los ticos formaron con su 5-4-1, con Keylor Navas en portería, línea de tres centrales, con Acosta en derecha, González en medio y Umaña en izquierda, y Gamboa -derecha- y Díaz -izquierda- como carrileros. Por delante, el doble pivote habitual, compuesto por Tejeda y Borges, mientras que ambos costados se situaron Joel Campbell, en banda derecha, y Bolaños, que jugó por izquierda. Bryan Ruiz, de partida, ocupó la posición de 9. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El partido se fue moviendo en diferentes episodios. El primero fue con una Costa Rica bastante valiente en la altura de su bloque, que incomodaba a Holanda en el momento de iniciar la jugada desde atrás, pero que ofrecía ventajas a los dos extremos rivales. Con Campbell y Bolaños arriba tratando de tapar a Martins Indi y de Vrij, y con Tejeda y Borges, el doble pivote, yendo sobre Sneijder y Wijnaldum, Holanda tenía la posibilidad de encontrar a Robben o a Depay, en caso de ofrecer un buen envío largo, en uno contra uno frente a Acosta y Umaña, los centrales externos ticos. En las primeras fases de encuentro hubo alguna opción de este tipo, pero además, dada la altura costarricense, había opciones de contragolpe peligrosísimas a favor de Holanda. Van Gaal dejaba arriba a sus tres hombres de ataque, y como Pinto le pide a sus carrileros que lleguen a campo contrario, esas pérdidas significaban un peligroso 3 (atacantes holandeses) vs 3 (centrales costarricenses) en la transición defensiva. Costa Rica se ajustó bajando su bloque y dibujando de forma más visible ese 5-4-1. A partir de ese momento, de Vrij y Martins Indi tenían más espacio para conducir y salir con comodidad, y Holanda se posó en campo rival, teniendo en cuenta, además, que con Ruiz como 9, a Costa Rica le faltaba algo de profundidad para ir tomando aire de forma constante. A partir de ese momento empezó a aparecer un Sneijder bastante fino en las recepciones, tanto delante como detrás del doble pivote tico, y los de van Gaal eran también productivos -aunque menos dañinos- en el ataque posicional. Holanda dominaba, pero se encontró con un Keylor Navas que fue decisivo en las acciones en las que tuvo que intervenir. 

Pases de Sneijder y regates de Robben (Fuente: Squawka)

En la segunda parte ese dominio sostenido de Holanda se plasmó de forma más evidente, mientras que Costa Rica no conseguía desplegarse, ni con Campbell de 9, ni cuando Pinto dio entrada a Ureña mediada la segunda parte. Sneijder empezó a dar un enorme recital, teniendo muchísimo peso en todas las construcciones ofensivas de su equipo, mientras que un Robben más clavado en derecha empezó a destrozar a los defensores ticos. Díaz, con amarilla, fue incapaz de frenarle, ni tampoco Umaña, el central de su perfil, que también acabó amonestado. Pinto decidió entonces invertir la posición de sus dos centrales externos, pero Acosta también acabó con tarjeta. Robben era capaz de, aunque recibiese en en una orientación incómoda, desbordar y producir peligro. Su mundial está siendo de auténtico escándalo. Eso sí, Keylor Navas seguía muy seguro y el partido se fue a la prórroga, donde ni siquiera la entrada de Huntelaar pudo sumar acierto en el remate a toda esa productividad procedente de Sneijder y Robben. Fue entonces cuando van Gaal, en un giro drástico del guión del partido, sacó a Krul por Cillessen en el minuto 120, quien a la postre sería decisivo parando dos penaltis de la tanda, y metiendo a Holanda en semifinales. En resumen, Holanda fue bastante productiva en varios tramos del partido, pero entre Keylor Navas, un van Persie no demasiado acertado, y por supuesto, la tremenda implicación, amor propio, y equilibrio defensivo colectivo de Costa Rica en muchas acciones, llevaron el partido a una tanda de penaltis que pasará a la historia por esa sorprendente decisión de cambio de porteros de Louis van Gaal. 

4. Reacciones de los protagonistas

Louis van Gaal (Fuente: fifa.com): "Por su unidad y su espíritu de equipo, éste es el mejor grupo con el que he trabajado. Creo que nuestra calidad ha sido muy superior a la de Costa Rica y que merecemos esta victoria. No sé cuánta posesión hemos tenido, cuántas veces hemos estampado el balón en los palos ni cuántas ocasiones hemos creado. Al fin y al cabo, sólo cuentan los goles. Habíamos practicado los penales, porque estoy convencido de que, si te acostumbras a lanzarlos de determinada manera, te sientes más cómodo cuando te toca hacerlo. Le explicamos a Tim Krul que él sería el mejor guardameta para la tanda de penales, puesto que es mucho más corpulento, pero no se le dijimos a Cillessen porque no queríamos entorpecer su preparación ni su concentración. No obstante, está claro quién será el portero titular en el próximo partido: será Cillessen, sin lugar a dudas. De todas formas, creímos que Krul era la mejor opción para los penales, como ha quedado demostrado. Intuyó la trayectoria de cada lanzamiento y acertó".

Jorge Luis Pinto (Fuente: fifa.com): "Nos vamos dolidos, pero contentos. Cuando llegamos aquí, pocos creían en nosotros. Sin embargo, durante este Mundial hemos hecho cosas muy bellas. Nos vamos, pero no nos vamos vencidos: ni siquiera pudieron con nosotros las superpotencias a las que nos enfrentamos. Pienso que esta noche hemos estado a la altura de los holandeses y, si bien podemos mejorar ciertos aspectos, hemos progresado muchísimo. Demostramos que podemos organizarnos, que tenemos una buena táctica y que sabemos jugar al fútbol. Dejamos una impresión digna y positiva del fútbol costarricense. Mis jugadores me han llenado de orgullo a mí y a todo un país. Lo dieron todo".

Análisis de partidos: Argentina 1-0 Bélgica

1. Contexto y datos del partido

Partido de cuartos de final. Argentina 1 (Higuaín) - Bélgica 0

Datos del partido (Fuente: squawka)

Argentina llegaba al choque después de haber eliminado a Suiza en el último minuto de la prórroga. Los de Sabella funcionaron bien en el segundo tiempo de esos octavos de final, y ese argumento competitivo a la hora de no sufrir en transición defensiva era su mejor argumento para estos cuartos. Bélgica, por su parte, también eliminó a los Estados Unidos en la prórroga, aunque frente al combinado norteamericano consiguió su mayor producción ofensiva en lo que llevábamos de torneo.

2. Planteamientos

Sabella mantuvo el 4-4-2 que vimos de partida en los octavos de final frente a Suiza. Con Agüero aún renqueante de su lesión, volvió a ser titular Lavezzi, mientras que Basanta entró por la sanción de Rojo. Los cambios más significativo, desde el punto de vista técnico, fueron Demichelis por Fede Fernández y Biglia por Gago. Así, Argentina formó con Romero en portería, Zabaleta lateral derecho y Basanta lateral izquierdo, y pareja de centrales compuesta por Demichelis y Garay. En medio campo, doble pivote para Biglia y Mascherano, con Di María como volante derecho, Lavezzi en el perfil izquierdo, y Messi liberado por detrás de Gonzalo Higuaín, que fue la referencia ofensiva de la albiceleste. 

Bélgica, por su parte, formó con el 4-3-3 que viene siendo habitual, con el único cambio con respecto al partido de octavos de Mirallas en lugar de Mertens. La defensa estuvo compuesta por Courtois en portería, Alderweireld lateral derecho, Vertonghen lateral izquierdo, y van Buyten-Kompany pareja de centrales. En medio campo, Witsel ejerció de pivote, mientras que Fellaini y De Bruyne le acompañaban en un escalón posterior como pareja de interiores. En la última línea, Mirallas ejerció de extremo derecho, con Hazard partiendo desde el perfil izquierdo, y Divock Oirigi, otra vez titular por delante de Lukaku, fue el delantero centro. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Argentina dominó el primer tiempo con bastante solvencia, porque era superior a Bélgica en varias fases del juego. Conseguía salir con relativa comodidad, encontrando a Messi y Di María con ventaja en campo rival, no sufría contragolpes peligrosos, y además se ordenaba bien en la defensa posicional, cerrando vías de penetración al conjunto belga. El 1-0 fue fruto de esas ventajas. Argentina, en primer lugar, tenía cierta comodidad a la hora de sacar la pelota, a pesar de que Bélgica alzaba a varios de sus futbolistas, suponiendo, con el objetivo de lograr robos más cerca de la portería de Romero. 

Bélgica alzaba a sus interiores para que se encontrasen con los dos pivotes argentinos, pero como Wilmots solo juega con un punta, uno de los dos centrales, o uno de los pivotes, quedaba libre. Esta era una ventaja demasiado grande para el 1x1 de Messi frente a Witsel, o incluso para el balanceo de Di María hacia posiciones interiores, que también conseguía recibir entre líneas. A partir de ahí, Argentina conseguía dominar. Cuando Messi recibía la pelota, Witsel y Fellaini quedaban muy alejados, y volvían rápido a tratar de ayudar a Witsel, lo que provocaba muchos hombres libres, a los que Messi encontraba con facilidad. Entre el 10 y Di María consiguieron varias conducciones muy peligrosas, ante las que solo Kompany, por puro ímpetu, pudo hacer frente. Esa facilidad argentina para atacar se traducía, además, en una buena organización defensiva. Sabella decidió asumir el riesgo de dejar que Vertonghen estuviese libre, a cambio de neutralizar el juego interior belga. Di María cerraba bastante su posición en la defensa organizada, y De Bruyne no podía recibir con comodidad. Cuando el fideo se lesionó, Sabella eligió a Enzo Pérez, que si bien, en términos de agilidad y profundidad quedaba lejos en las prestaciones de Di María, en campo propio, sin pelota, pudo ofrecer un rendimiento similar. Argentina fue superior en el primer tiempo, incluso como para marcharse con algo más de ventaja en el marcador. 

Interecepciones y despejes de Garay en el segundo tiempo (Squawka)

Argentina sufrió, eso sí, en el segundo tiempo con la ausencia de un jugador como Di María, porque empezó a notarse que faltaban conducciones que permitiesen al equipo avanzar metros y juntarse en campo rival. En ese sentido el que mejor trabajo ofreció fue Higuaín. Ya durante el primer tiempo comenzó a hacer movimientos diagonales bastante largos que le dieron mucho a su equipo, y en el segundo fue capaz de quedarse la pelota y guardarla hasta que aparecieran más camisetas albicelestes. Así Argentina fue dejando pasar el tiempo, hasta que en el tramo final Wilmots optó por la vía rápdida: Fellaini, Lukaku y van Buyten en el área a buscar envíos directos. Dada la fortaleza física de los tres hombres a los que el seleccionador belga encomendó la tarea, lo lógico era creer que el combinado europeo hubiese tenido alguna opción más de gol, porque esta idea se extendió durante unos 15 minutos. Pero apareció en la zaga argentina un titán: Ezequiel Garay fue el hombre de ese tramo de partido, repeliendo todos los intentos belgas y siendo decisivo en la resistencia argentina. En resumen, Bélgica se vio ampliamente superada en la primera mitad, aunque consiguió llevarse un marcador ajustado a los vestuarios. En el segundo, a Argentina le costó estirarse, pero los caminos que trató de abrir Wilmots hacia la portería de Romero fueron bien repelidos, con un buen Garay como protagonista. Al final, Argentina regresará a unas semifinales de la Copa del Mundo 24 años después.

4. Reacciones de los protagonistas

Alejandro Sabella (Fuente: fifa.com): "Siento una gran felicidad por este plantel, que ha estado a la altura de la historia, por todo el cuerpo técnico, por la familia... Me parece que fue el mejor partido en lo que respecta al equilibrio que tuvimos y al juego que desplegamos. Fue excelente desde lo táctico, desde lo estratégico y desde lo que debe ser un equipo, con un compañero sacrificándose por el otro. Además, pudimos reponernos a la salida de Di María, que fue una baja muy costosa. Cumplimos con nuestro objetivo de mínima, que era estar entre los cuatro mejores del mundo, pero vamos por más. Para eso vinimos".

Marc Wilmots (Fuente: fifa.com): "Argentina no nos impresionó. Me pareció un equipo ordinario, pero mostró su experiencia. Era el favorito, hizo el gol temprano y luego supo jugar con la ventaja, cortándonos el ritmo. Nos quedan enseñanzas: en estos torneos, los errores pequeños se sufren, y a veces debes ser más inteligente que el rival. Hoy lo intentamos por todos los medios, pero no hubo caso. De todos modos, no me parece que este resultado sea una decepción, siempre puedes perder con Argentina en cuartos. Hay que ver lo positivo: este equipo jugó bien y tuvo su reconocimiento. Ha sido un buen torneo".

Análisis de partidos: Brasil 2-1 Colombia

1. Contexto y datos del partido

Partido de cuartos de final. Brasil 2 (Thiago Silva, David Luiz) - Colombia 1 (James Rodríguez -p-)

Datos del partido (Fuente: squawka)

Brasil llegaba al choque de los cuartos de final después de haber sufrido muchísimo ante Chile, hasta el punto de que Pinilla tuvo el pase para los de Sampaoli en el último minuto de partido, en un disparo que se fue al palo. Finalmente, la canarinha pasó en la tanda de penaltis. Colombia, por su parte, fue quizá la selección que más convenció en los octavos de final, tras resolver con solvencia su partido ante Uruguay.

2. Planteamientos

Luiz Felipe Scolari hizo dos cambios con respecto al once que se ha asentado como titular en testa Copa del Mundo. Por un lado, Maicon le ganó el sitio a Dani Alves, y por otro, la baja de Luiz Gustavo, que el técnico brasileño resolvió dando entrada a Paulinho. Así, Brasil formó con el 4-4-2 habitual, con Julio Cesar en portería, Maicon lateral derecho, Marcelo lateral izquierdo, y pareja de centrales para Thiago Silva y David Luiz para formar la defensa. En medio campo, el doble pivote lo formaron Fernandinho, que vino a hacer el papel de Luiz Gustavo como primer centrocampista, mientras que Paulinho hizo de segundo pivote. En medio campo por derecha jugó Oscar, por izquierda lo hizo Hulk, y en punta jugaron Neymar, como segundo delatnero, y Fred, que hizo de 9.

Pekerman, por su parte, cambió el dibujo del partido frente a Uruguay, donde Jackson jugó al lado de Teo, e introdujo a Ibarbo, que se puso en banda izquierda para cambiar ese sistema de dos puntas por el 4-2-3-1 que vimos hoy. Colombia formó en defensa con Ospina en portería, Zúñiga lateral derecho, Armero lateral izquierdo, y Zapata-Yepes como pareja de centrales. En medio campo, Carlos Sánchez fue primer pivote, mientras que Guarín -una de las grandes sorpresas de la alineación- le acompañó. La banda derecha fue para Cuadrado y la izquierda para Ibarbo, mientras que James Rodríguez jugó totalmente liberado por detrás del delantero centro, que fue Teófilo Gutiérrez.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Brasil salió con una agresividad tremenda. Buscó apretar la salida rival desde el primer momento, lanzando a mucha altura a sus puntas y centrocampistas, y Colombia se vio realmente superada en ese tramo inicial. Brasil no se asentaba en campo rival gracias a cadenas de pase largas o gracias a una estructura táctica sólida, sino por puro avasallamiento. A través de la altura de sus futbolistas, anticipaciones, y disputas ganadas en balones divididos, la canarinha comenzó a producir ocasiones. Así, muy pronto, encontró el 1-0, obra de Thiago Silva, y el discurso se mantuvo durante ese primer tiempo. Maicon y Marcelo comenzaron a producir más de lo que estábamos viendo en los laterales brasileños a lo largo del torneo, y para Colombia fue una buena noticia irse al descanso con tan solo un gol de desventaja, en una primera parte en la que solo alguna conducción de James Rodríguez hizo al conjunto cafetero estirarse ligeramente. 

Despejes (21) e intercepciones (6) de David Luiz y Thiago Silva en el partido (Fuente: squawka)

En el segundo tiempo, Brasil no pudo mantener la misma agresividad en su juego sin pelota, y Colombia comenzó a aprovecharse de algunas ventajas que les daba el sistema de Scolari. La principal fue la ausencia de Luiz Gustavo, gracias a la cual un impresionante James Rodríguez comenzó a colarse en zona de tres cuartos y producir situaciones ventajosas. En ese tramo de partido, Thiago Silva y David Luiz, la pareja de centrales brasileña, pudo con prácticamente todo. Fueron los hombres más eficaces del choque, dejando durante un gran tramo de segunda parte una actuación para el recuerdo. David Luiz solía salir más veces a anticipar a medio campo y a hacer cruces más largos, mientras que Thiago Silva despejaba todo lo que llegaba al área. Entre los dos hicieron que se fueran consumiendo los minutos sin que Colombia, que estaba ofreciendo buenos argumentos, pudiera crear peligro. 

Poco después David Luiz se inventó un golazo brutal, y ya fue con 2-0 y en el tramo final, tras la entrada de Bacca, cuando Colombia comenzó de manera más constante a encontrar alguna vía para superar a la pareja de centrales brasileña. El jugador del Sevilla comenzó a moverse a los espacios, y también lateralmente para recibir entre líneas, y sus gestos resultaban claves para impedir que la precisión de la defensa brasileña se mantuviese. Así, además, James tuvo más tiempo para recibir y conducir en esa espalda de Paulinho, y Colombia generó situaciones de más calidad, como la que supuso la jugada del penalti que acabaría transformando el hombre del Monaco. Al final, Brasil pudo resistir y jugará las semifinales ante Alemania, aunque el rendimiento de los de Scolari fue decreciendo con el paso de los minutos. En resumen, un Brasil arrollador en el primer tiempo, que se fue con un marcador corto al descanso, unida a la competitividad de su pareja de centrales, que consiguió sofocar el mejor tramo de los colombianos, significaron el pase a la siguiente ronda. 

4. Reacciones de los protagonistas

Luiz Felipe Scolari (Fuente: fifa.com): "Arrancamos creando buenas oportunidades de gol que Hulk no pudo terminar, y el portero hizo buenas paradas. Con 2-0, no manejamos bien el ritmo del partido. Teníamos que haber calmado el juego pero aceleramos. Queríamos anotar más, como para demostrar que podíamos y no, no era eso lo que debíamos hacer. Hay que saber bajar el ritmo".

"Nadie creía en nosotros hace un mes y lo logramos. Estos jugadores tiene habilidad y ahora tenemos otro partido muy importante. Son siete pasos y ya hemos dado cinco".

"David Luiz ha visto muchos goles del Corinthians, de Marcelinho Carioca, que metía así las faltas y jugaba como nadie".

José Pekerman (Fuente: fifa.com): "Es un momento muy duro para nosotros. Tuvimos siempre la ilusión de ganar este partido aun sabiendo que Brasil iba a ser un rival muy difícil. En este tipo de partidos, cualquier error te puede eliminar. Los dos equipos tenían armas para ganar, y al final Brasil se lo llevó con dos jugadas a balón parado. Tras el primero se calmaron y Colombia perdió un poco el sentido del juego que había mostrado hasta entonces. Sufrimos en las transiciones de Brasil. Quizás buscamos el empate muy rápido y nos desestabilizamos un poco. Hubo mucha intensidad y tensión en cada jugada, y eso cortó un poco el juego. Nuestro ímpetu y deseo de ganar no fue suficiente. Colombia fue valiente en este torneo, mostró jugadores talentosos, compitió con un gran espíritu y alma".

Análisis de partidos: Francia 0-1 Alemania

1. Contexto y datos del partido

Partido de cuartos de final. Francia 0 - Alemania 1 (Hummels)

Datos del partido (Fuente: squawka)

Ninguna de las dos selecciones llegaban a su partido de octavos de final con las mejores sensaciones. Francia había eliminado a Nigeria (2-0), pero el combinado africano puso en serios apuros al equipo de Deschamps durante algunos tramos del partido, mientras que Alemania tuvo que llegar a la prórroga para vencer a una combativa Argelia.

2. Planteamientos

Didier Deschamps no hizo modificaciones importantes con respecto al partido de los octavos de final. Entró Sakho, que fue baja en el partido anterior, y Griezmann por Giroud, que ya frente a Nigeria dio la sensación de mejorar el ataque galo. Francia formó con su 4-3-3 habitual, con Lloris en portería, defensa compuesta por Debuchy -derecha- y Evra -izquierda- en los laterales, y Varane-Sakho como pareja de centrales. En medio campo, Cabaye mantuvo su posición como pivote, con Pogba como interior derecho y Matuidi interior izquierdo. En ataque, Valbuena partía de la posición de extremo derecho, Griezmann del perfil izquierdo, mientras que Benzema, con la suplencia de Giroud, regresó a su puesto de delantero centro. 

Joachim Löw, sin embargo, sí hizo cambios relevantes. La posición de Lahm como pivote estaba dejando dudas en la transición defensiva del equipo, y el seleccionador alemán decidió hacerle regresar al lateral derecho para dar entrada a Schweinsteiger, además de la inclusión de Klose en el puesto de Götze. Alemania salió en 4-3-3, con Neuer en portería, Lahm lateral derecho, Höwedes lateral izquierdo, y Jerome Boateng y Hummels como pareja de centrales. Por delante fue Schweinsteiger quien ejerció el rol de mediocentro, con Khedira como interior derecho y Kroos interior izquierdo. Por delante, Müller partió escorado a la derecha, Özil lo hizo volcado a la izquierda, y fue Miroslav Klose quien se ocupó del rol de 9.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Alemania entró en el choque funcionando, colectivamente, a su máximo nivel en lo que llevábamos de torneo. La modificación de Lahm como lateral derecho y la titularidad de Khedira arregló algunos problemas, sobre todo en la salida de pelota. Alemania tenía un apoyo lateral de calidad en su capitán, y además, en Schweinsteiger un mediocentro que utilizaba el cambio de orientación para encontrarle si era necesario. Eso permitió a Alemania, por primera vez en lo que va de Mundial, asentarse con solvencia en el ataque posicional. Los de Löw dieron encontraron pases precisos y determinantes en la zona de tres cuartos, porque Müller y Özil conseguían colarse a espaldas de los interiores franceses, que se lanzaban sobre los alemanes para tratar de estorbarles en esa salida de pelota, y el combinado germano se metía con facilidad en campo rival. Fue un tramo en el que Alemania atacó con solvencia, terminando además sus acciones y sin dar opción de contragolpe a los franceses. 

Intercepciones Hummels (tres dentro del área contra disparos de Benzema)

Tras el gol de Hummels Francia consiguió desplegarse un poco más en el tramo final de la primera parte, gracias a los movimientos a los espacios de Valbuena y sobre todo de Griezmann. Envíos largos les encontraron en la espalda de la defensa alemana, y lo hacían porque probablemente hubo una consigna clara de Deschamps: ese envío debía de salir hacia fuera. Quizá el motivo fuese el recital que dio Neuer en el partido frente a Argelia, por lo que alejar la pelota de su área de influencia era una buena forma de ganar opción de remate. Eso llevó a que viésemos un Benzema más pendiente de encontrar posición de finalización una vez Griezmann o Valbuena recogían esa pelota profunda. Fue en esos momentos donde apareció un soberbio Hummels, que a lo largo del partido llegó a hacer hasta tres acciones decisivas para evitar el gol del punta del Real Madrid. 

Durante el segundo tiempo Alemania consiguió administrar su ventaja con solvencia, frente a una selección francesa que solo encontraba caminos hacia la portería de Neuer con ese mecanismo de ruptura diagonal de Griezmann. Los cambios de Deschamps no terminaron de darle opciones a Francia, puesto que Remy quedó demasiado clavado en la derecha y recibiendo poco, y Giroud entró demasiado tarde. Entre Hummels y Neuer, principales protagonistas de la resistencia alemana, consiguieron que la puerta quedase a cero, lo que a la postre terminó significando el pase a las semifinales, cuarta vez que la Mannschaft lo consigue de forma consecutiva. En resumen, Alemania mostró en el tramo inicial su mejor cara en el torneo, instalándose en campo rival, terminando jugadas y limitando contras rivales, mientras que a una Francia monocromática se le quedó demasiado corto el recurso Valbuena-Griezmann atacando los espacios y Benzema rematando.

4. Reacciones de los protagonistas

Didier Deschamps (Fuente: fifa.com): “Aunque nuestra aventura en Brasil se acaba aquí y estamos tristes, decepcionados y frustrados, seguiremos adelante. Espero que este grupo de jugadores puedan jugar juntos durante mucho tiempo. Tengo mucho trabajo por hacer con ellos, pero no cabe duda de que la cosa promete. Necesitaremos mantener este impulso, con esta calidad. Aunque en este momento estoy dolido y disgustado, tengo que recordar que hay muchos aspectos positivos. Hoy no ha habido mucha diferencia entre ambas selecciones. En comparación con Alemania, éramos un equipo mucho más inexperto, y ellos están más acostumbrados a jugar partidos internacionales importantes como éste. Creo que estuvimos un poco timoratos al principio, y ellos marcaron pronto. Después de eso, mostramos cosas prometedoras. Creamos ocasiones y podríamos haber sido más eficaces, pero Manuel Neuer ha hecho un buen partido. Dicho esto, ellos podrían haber marcado perfectamente el segundo cuando nos fuimos con todo hacia arriba al final”.

Joachim Löw (Fuente: fifa.com): “Creo que ambas selecciones han jugado bien en defensa hoy. No ha habido muchas oportunidades de gol, lo cual formaba parte de nuestro plan. No queríamos conceder ocasiones a Francia, dada la calidad de sus delanteros. Los hemos sabido taponar bien, y esa ha sido la clave. Ellos han hecho lo mismo contra nosotros, porque Yohan Cabaye y Paul Pogba son una gran pantalla para la defensa, y sabíamos que teníamos que irnos a las bandas para crear ocasiones. Por ese motivo cambié a Philipp Lahm a la posición de lateral. Francia lo dio todo para intentar forzar el empate, pero Mats Hummels y Jerome Boateng estuvieron excelentes, y Manuel Neuer lo hizo bien cuando tuvo que intervenir. En los últimos cuatro Mundiales hemos llegado a semifinales. Se trata de un logro importante. Ahora tenemos que dar el siguiente paso”.

Análisis de partidos: Bélgica 2-1 Estados Unidos

1. Contexto y datos del partido

Partido de octavos de final. Bélgica 2 (De Bruyne, Lukaku) - Estados Unidos 1 (Green). Victoria de Bélgica en la prórroga (0-0 en el tiempo reglamentario).

Datos del partido (Fuente: squawka)

Bélgica llegaba a los cuartos de final después de haber liderado su grupo con tres victorias. Es cierto que en ninguno de esos partidos dejó buen sabor de boca en lo colectivo, pero sí había mostrado poder resolver sus compromisos gracias a la calidad de su banquillo. Estados Unidos, por su parte, había pasado en un grupo con Alemania, Portugal y Ghana, por lo que las sensaciones eran muy positivas. 

2. Planteamientos

Marc Wilmots no hizo demasiados cambios con respecto al once que se está perfilando como titular, y quizá la noticia más importante fue la elección de Origi por delante de Lukaku. Bélgica pareció salir de partida con su 4-3-3 habitual, pero las marcas individuales que ordenó Wilmots en medio campo hicieron que Fellaini pasase más tiempo a la altura de Witsel. Así, el combinado belga salió con Courtois en portería, Alderweireld lateral derecho, Vertonghen lateral izquierdo, y pareja de centrales para van Buyten y Kompany. En medio campo, Witsel hizo de pivote, con Fellaini a su derecha y De Bruyne, dadas las circunstancias, más suelto. En los costados, Mertens ocupó el perfil derecho y Hazard el izquierdo, mientras que la punta del ataque fue para Divock Origi. 

Jürgen Klinsmann, por su parte, sí introdujo un cambio relevante, y a priori bastante sorprendente, porque no había ninguna noticia que indicase que Beckerman pudiera tener algún problema que le impidiese disputar el partido. Los Estados Unidos salieron con Howard en portería, Fabian Johnson -derecha- y Beasley -izquierda- como laterales, y pareja de centrales para Besler y Omar González. En medio campo, el principal cambio, la entrada de Cameron como pivote, con Jones y Bradley como acompañantes pero trazando movimientos más largos. Las bandas las ocuparon Zusi -derecha- y Bedoya -izquierda-, mientras que Dempsey volvió a jugar como hombre más adelantado.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El partido fue un ida y vuelta constante. Quizá la alineación de Cameron por parte de Klinsmann podía entenderse como una adaptación al juego directo sobre Fellaini, pero lo cierto es que Estados Unidos en ningún momento tuvo la intención de replegar, por lo que no hubo demasiados duelos con el gigante del Manchester United cerca del área. En el intercambio de golpes Bélgica dio la sensación de estar más cerca del gol por un simple tema de calidad individual. Ambas selecciones tenían sus mecanismos para salir, pero la que lo hacía con más claridad y la que encontraba posiciones de remate con constancia era Bélgica. Wilmots ordenó marcas prácticamente individuales de sus tres centrocampistas a los hombres de medio campo de Estados Unidos, y esto se tradujo en una ventaja ante la incapacidad estadounidense para sacar réditos. 

Los movimientos agresivos de Jermaine Jones y Bradley hacían que Fellaini y Witsel les persiguieran hasta juntarse con su defensa a baja altura, y la falta de precisión de Estados Unidos para terminar jugadas dejaba a Bélgica con una gran ventaja para contragolpear una vez recuperaba la pelota: Kevin De Bruyne quedaba liberado, en aclarado, para atacar a un hombre como Cameron, que no es un especialista para esa posición. Este fue el principal recurso de Bélgica durante gran parte de partido: robo y recepción de De Bruyne, que lanzaba la contra con maestría. En esta dinámica el combinado de Wilmots encontró un gran número de remates, que constantemente eran repelidos por un inmenso Howard.

Dio la sensación de que Estados Unidos jamás aprovechó esas marcas individuales para sacar beneficio propio, y el papel de Dempsey como delantero centro no ayudaba a ello. Los espacios que podían generar Bradley y Jones con sus movimientos no eran aprovechados por nadie, y la entrada de un 9 como Wondolowski podía pasar a solucionar esos problemas. Fueron un espejismo esos primeros contactos de Dempesy más abajo en el tramo final de segundo tiempo, porque para entonces Bélgica ya había encontrado una dinámica de partido que le llevaba a encontrar remates de forma constante, aunque el acierto de Howard llevó el partido a la prórroga. Fue entonces cuando la entrada de Lukaku, que sustituyó a un muy productivo Origi, resultó decisiva. El escenario del encuentro, con bastantes espacios para correr y pelear pelotas divididas, llevó al del Everton a ser clave en la prórroga, produciendo la jugada del 1-0 y marcando el 2-0. El gol postrero de Green puso la incertidumbre en el tramo final, aunque apareció Courtois para negar los penaltis. En resumen, vivimos uno de los partidos más descontrolados del mundial, y el intercambio de golpes llevó a que la calidad belga encontrase más situaciones de remate. Al final, un día más, el banquillo que Wilmots tiene a su disposición fue decisivo para acabar ganando el partido. 

4. Reacciones de los protagonistas

Marc Wilmots (Fuente: fifa.com): "Esta noche hemos visto una Bélgica muy ofensiva. Hemos lanzado 27 disparos a puerta, el primero de ellos en el minuto 2, y no hemos dejado de atacar ni un momento en los 118 minutos siguientes. Quiero felicitar a Jurgen Klinsmann y a la selección de Estados Unidos, especialmente a Tim Howard, quien ha hecho un partido fantástico. Sin embargo, creo que merecemos esta victoria. Hemos jugado bien al fútbol, hemos sido muy valientes y nos hemos esforzado hasta el límite. A veces, en partidos como éstos, en los que disfrutas de tantas ocasiones y te las frustran todas, el resultado no refleja la situación, pero nosotros mantuvimos la fe hasta el final. Ahora disponemos de cuatro días para preparar el partido contra Argentina. No es mucho tiempo. No somos favoritos, pero queremos ganar".

Jürgen Klinsmann (Fuente: fifa.com): "Es un mal trago acabar perdiendo después de 120 minutos dándolo absolutamente todo. Pero en este partido han pasado muchas cosas, ha sido increíble. Lo que Tim Howard ha hecho esta noche es fenomenal, sobresaliente y maravilloso. Nos mantuvo en el partido. Ha hecho un encuentro soberbio; hay que reconocérselo y aplaudirlo por ello. Dicho esto, tuvimos ocasiones para conseguir el empate, pero vaya mi enhorabuena para Bélgica. Me siento muy orgulloso de los jugadores, no sólo por esta noche, sino por todo lo que han hecho a lo largo de la competición. Han sido el orgullo de su nación. El fútbol seguirá creciendo imparable en Estados Unidos. Cada vez está más fuerte y no dejaremos de trabajar para seguir avanzando".