miércoles, 22 de octubre de 2014

Análisis de partidos: Roma 1-7 Bayern München

1. Contexto y datos del partido


Jornada 3 del Grupo E de la Liga de Campeones: Roma 1 (Gervinho) - Bayern München 7 (Robben x2, Götze, Lewandowski, Müller -p-, Ribery, Shaqiri)

Datos del partido (Fuente: Squawka)

La Roma llegaba a uno de los partidos más exigentes de la temporada con muy buenas sensaciones. Es cierto que hacía 15 días, en su penúltimo partido oficial, había salido derrotado en su visita al Juventus Stadium, pero lo hizo dejando muy buenas sensaciones. En el último partido de la Serie A, los de Rudi Garcia dejaron una victoria contundente, después de ganar con mucha solvencia (3-0) al Chievo Verona. El Bayern, por su parte, llegaba tras ganarle 6-0 al Werder Bremen en su partido de Bundesliga, y dentro de una fenomenal dinámica de resultados, visitando Roma sin haber recibido gol en sus últimos 8 partidos.

2. Planteamientos

Rudi Garcia no hizo ninguna modificación importante para adaptarse a su rival. Así, la Roma formó con su 4-3-3 habitual, con De Sanctis en portería, defensa compuesta por Manolas y Yanga-Mbiwa como pareja de centrales, y Torosidis -derecha- y Ashley Cole -izquierda- como laterales. En medio campo, De Rossi jugó en su posición habitual de mediocentro, con Nainggolan como interior derecho, y Pjanic, como interior izquierdo, completando el trío de centrocampistas romano. Por delante, la delantera habitual, con Totti actuando como falso 9, con Iturbe y Gervinho como delanteros escorados, aunque el contexto del partido les llevó a pasar más tiempo en la posición de extremos.

Pep Guardiola, como suele ser habitual, sí adaptó su planteamiento al rival, aunque repitió la base vista en las dos primeras jornadas de la Liga de Campeones, formando con tres centrales. El Bayern salió en un 3-5-2 asimétrico. Los tres centrales fueron Benatia -derecha-, Jerome Boateng -centro- y Alaba -izquierda-. Las bandas, a distintas alturas, fueron ocupadas por Bernat -izquierda- y Robben -derecha-, que se clavaba como extremo derecho. En medio campo, Xabi Alonso jugó como mediocentro, con Lahm como interior derecho y Götze interior izquierdo, aunque más suelto y liberado para moverse entre líneas. En punta, Müller y Lewandowski.


3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Para analizar el partido, hay que mencionar el componente emocional que, indiscutiblemente, toma protagonismo cuando se da un resultado de esta índole entre dos equipos de primerísimo nivel. En primer lugar, hay que mencionar la especial ilusión que la Roma había puesto en este partido. El ambiente que rodeaba el choque decía que tanto club como afición creían en el triunfo, y el 0-2 entumeció los músculos de los jugadores romanistas, que comenzaron a encadenar errores de lectura y concentración, además de falta de agresividad. Dicho esto, hay una serie de argumentos futbolísticos que hay que anotar en la columna de méritos de Guardiola. 

La Roma no tiene un receptor de juego directo. Totti, Gervinho e Iturbe no pueden meter al equipo en campo rival después de un envío largo. En las disputas con Jerome Boateng y Benatia perderían -en realidad, lo harían contra cualquier pareja de centrales del fútbol italiano-, y una máxima de la Roma es iniciar el juego desde atrás, progresando en bloque con la pelota desde el suelo. El Bayern trató de limitar esto desde un primer momento, mandando mucha gente a presionar sobre la salida romanista, y acompañando con la línea defensiva, que por momentos llegó a situarse a gran altura (próxima captura).


A partir de ahí el Bayern comenzó a maniatar a la Roma, que perdía numerosas pelotas en situación peligrosa, o que se veía en la obligación de regalarla para que los centrales del Bayern ganasen la posesión. A partir de ahí, vimos dos tipos de ataque en el Bayern. Uno fue con una transición veloz después de un robo cerca del área rival, y el otro, tras un ataque organizado más prolongado, que tenía como objetivo permitir a Robben encarar en uno contra uno a Ashley Cole. En ambas situaciones hay dos nombres a destacar; Xabi Alonso -sobre el que la Roma no hizo ningún trabajo específico y tuvo tiempo y espacio para encontrar a compañeros que se movían en zona de 3/4-, y David Alaba, que desde su posición de central izquierdo se adelantaba para sumar un activo al medio campo, y ayudar al Bayern a asentar la posesión en la zona que quería: la izquierda.


El objetivo (captura) era claro. Si la combinación salía y se encontraba profundidad en aquella zona, perfecto, pero la idea era acumular gente (y rivales) en la zona izquierda, para que Robben tuviera la oportunidad de desbordar a Ashley Cole en el perfil opuesto. Quedaba claro que el hombre que debía de hacer volcar la defensa romanista era el holandés, y el 10 del Bayern no defraudó, cuajando una actuación brillante. A partir de estos dos conceptos los bávaros se adelantaron en el marcador, y fue entonces cuando hay que hacer referencia a ese peso emocional que tuvo para un equipo como la Roma, que llegaba con altas expectativas, verse superado de forma tan amplia, y a partir de entonces las concesiones defensivas se acentuaron. En resumen, vimos a un Bayern que metió el dedo en la yaga desde el planteamiento, de forma que explotó las carencias de los romanistas, y la dinámica provocada por el resultado fue haciendo el resto.

4. Reacciones de los protagonsitas

Rudi Garcia (Fuente: Gazzetta dello Sport): "La culpa es mía. No ha sido un problema mental, si no técnico. Hemos dejado jugar al Bayern en el primer tiempo y la culpa es mía. Me equivoqué en la estrategia, tuvimos que jugar mucho más cerrados. En el primer tiempo fuimos meros espectadores del juego. Debemos de ser más compactos".
"Esta derrota nos enseña los pasos que debemos de dar para enfrentarnos a los mejores equipos del mundo. Perder contra el Bayern es normal, porque siempre ganan, pero esto es una bofetada y por eso me duele".
"Por suerte mejoramos en el segundo tiempo, y de no ser por Neuer habríamos conseguido uno o dos goles más. La única buena noticia de hoy es el empate entre el CSKA y el Manchester City, que nos permite ser segundos".

Pep Guardiola (Fuente: DailyMail): "Sí, aún hay cosas que se pueden hacer mejor. Como por ejemplo no conceder tantas ocasiones como le permitimos a la Roma en el inicio de la segunda parte". 
"Este partido es una excepción, no la diferencia real entre los dos equipos. Veremos que pasa dentro de dos semanas". 
"Marcamos un gol temprano y eso nos tranquilizó, y poco después, logramos otro. La Roma tiene un buen equipo y juega muy bien, pero nosotros fuimos agresivos, tomamos las decisiones correctas y encontramos el espacio".

1 comentario:

  1. Sigamos comprendiendo temas interesantes como el de teapuesto
    ya que siempre nos brinda los mejores consejos.

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