Final de la Copa de Asia: Australia 2 (Luongo, Troisi) - República de Corea 1 (Son Heung-min)
Datos del partido (Fuente: Mis Marcadores) |
La selección australiana llegaba a la final después de haber eliminado en las semifinales a los Emiratos Árabes Unidos, y en los cuartos de final a China, ganando ambos encuentros con bastante solvencia. Solo habían perdido un partido hasta la fecha en el torneo, y había sido en la última jornada de la fase de grupos frente a su rival en la final. Una República de Corea que había crecido claramente en el desarrollo de la Copa de Asia. Después de una fase de grupos bastante espesa, sus victorias contra Uzbekistán -cuartos- e Irak -semifinales- habían sido mucho más solventes. Afrontaba la final habiendo ganado todos sus partidos, y sin haber encajado gol.
2. Planteamientos
No hubo sorpresa alguna en la alineación de Angelos Postecoglou, y Australia mantuvo la estructura que hemos visto a lo largo del torneo. Ese 4-3-3 en el que el único puesto sin definir de manera clara es el interior izquierdo. Los soceroos salieron con Ryan bajo palos, defensa compuesta por Franjic como lateral derecho, Davidson en el perfil izquierdo, y pareja de centrales formada por Sainsbury y Spiranovic. En medio campo, Jedinak fue el mediocentro, con Luongo y Milligan, por delante, como pareja de interiores. el once lo completó la delantera titular, con Kruse en un extremo, Leckie en el otro, y Tim Cahill en su rol de 9, como jugador más adelantado del equipo.
Uli Stielike, por su parte, sí introdujo una modificación relevante, con respecto a lo que habíamos visto en los dos cruces anteriores. No en el sistema, puesto que la República de Corea mantuvo el 4-2-3-1 que hemos visto a lo largo del torneo. La portería fue para Kim Jin-hyeon, con defensa formada por Cha Du-ri -derecha- y Kim Jin-su -izquierda- como laterales, y Kwak Tae-hwi y Kim Young-gwon como centrales. En medio campo, entró Jang Hyun-soo para jugar en el doble pivote junto a Ki Sung-yueng, y desplazó a banda izquierda a Park Joo-ho. En la otra banda se ubicó el mediapunta del Bayer Leverkusen Son Heung-min, con Nam Tae-hee en el rol de '10', jugando por detrás de Lee Jeong-hyeop, el delantero centro.
3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo
El arranque de partido fue complicado para Australia, como dando la sensación de que emocionalmente debe de ser difícil afrontar una final haciendo de local. Los socceroos estuvieron muy imprecisos en prácticamente todos sus toques en campo rival, y cada robo de la República de Corea se transformaba en una situación de ventaja para los de Stielike. Dos hombres destacaron en esa primera media hora de encuentro: Cha Du-ri y Kim Jun-su, los dos laterales. Ni Kruse ni Leckie les acompañaban con intensidad una vez Corea robaba la pelota, y ambos llegaron con peligro de forma bastante constante a las inmediaciones del área rival. El tercer hombre a destacar en ese período de encuentro fue Son Heung-min, que encontró varios remates en muy buena posición, y que acabaron, por poco, sin coger portería. Una acción resultó el punto de inflexión entre ese dominio coreano y el cambio de tendencia en el partido, y tuvo como protagonista a Massimo Luongo, uno de los hombres más destacados del torneo. La República de Corea encontró una de esas jugadas en la que tuvo profundidad por banda, Son conectó un buen remate y Luongo lo taponó. Fue una ocasión clarísima. Minutos después, el propio Luongo recibió un gran balón filtrado por parte de Sainsbury, y con un disparo desde fuera del área puso el 1-0, resultado con el que la final se marchó al intermedio.
En el segundo tiempo, los coreanos comenzaron a jugar con algo más de continuidad cerca del área rival, pero Australia mostró dos argumentos de calidad para contrarrestar la situación. El primero de ellos fue algo que ya vimos funcionar a gran nivel en el partido de semifinales frente a los Emiratos Árabes Unidos: la buena defensa del área propia del triángulo Spiranovic-Sainsbury-Jedinak. Ahí la República de Corea echó de menos algo más de presencia para terminar las combinaciones que surgían metros más atrás. El otro buen argumento fue la entrada de Juric en sustitución de Cahill. El delantero del Western Sidney Wanderers tiene más zancada, estaba fresco y comenzó a dar alguna buena salida para su equipo, que cada vez tenía más espacios. Esto fue retrasando el arreón coreano, hasta que en el tiempo de descuento Son, que estuvo muy activo e intentándolo durante todo el choque, encontró el remate que igualó la final. 1-1 y a la prórroga, donde, y a pesar de que ambos equipos habían modificado su idea inicial por exigencias del guión, dio la sensación de que Australia estaba mejor armada.
En la prórroga, Corea comenzó a jugar con Jan Hyun-soo como hombre más adelantado (intercambiando su posición con Son, que prefería venir a pedirla metros más atrás y no hacer de referencia), y con Ki acercándose a zona de 3/4. Es decir, si con Lee Jeong-hyeop los coreanos habían tenido problemas de presencia en el área, ahora estos se acrecentaban. Australia seguía defendiendo bien, y acabó aprovechando una muy buena acción de Juric (y acción defensiva muy floja de Kim Jin-su) para poner el 2-1 definitivo, obra de Troisi. En resumen, el resultado de la final puede resumirse a través del tópico de las áreas, puesto que la selección australiana estuvo más contundente en la propia, y más decisiva en la rival, y una República de Corea que probablemente tuvo un punto más de producción en el plano ofensivo, mostró un rendimiento inverso en este sentido.
4. Reacciones de los protagonistas
Ange Postecoglou (Fuente: afcasiancup.com): "Estoy muy orgulloso de todos los jugadores y el cuerpo técnico. No podría estar más feliz. Fue un tipo de partido diferente esta noche, fue una final y sabes que hay cambios en el guiín, pero el coraje que demostraron los futbolistas fue enorme".
"Mi única preocupación llegó cuando encajamos un gol tan tarde, los chicos pudieron quedar desconsolados a partir de ese momento, pero yo sabía que podíamos acabar igual de fuertes. Era solo una cuestión de aprovechar la oportunidad cuando se presentase, y lo hicimos. Estoy muy orgulloso de ellos".
"Se que todo el país lo celebrará esta noche. El fútbol es un gran juego, el más grande del mundo".
Uli Stielike (Fuente: afcasiancup.com): "No estoy de acuerdo en que no somos campeones. Es verdad que no tenemos la copa, pero nuestros jugadores son campeones. En sus corazones, en una gran cantidad de mensajes que han recibido después del partido, todo el mundo está dando la mano a los futbolistas".
"Fue un partido en el que la victoria pudo caer de uno u otro lado. Lo más justo hubiese sido un empate y que cada equipo se hubiese llevado la copa dos años a casa".
"Hoy ha sido el mejor partido si hablamos de sensaciones, cuando juegas contra 76000 personas y algunos futbolistas no han jugado nunca en ese ambiente, pero el lenguaje corporal fue el mejor. No hubo diferencia entre el equipo local y el visitante, fuimos muy agresivos y tuvimos un gran espíritu".
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Ange Postecoglou (Fuente: afcasiancup.com): "Estoy muy orgulloso de todos los jugadores y el cuerpo técnico. No podría estar más feliz. Fue un tipo de partido diferente esta noche, fue una final y sabes que hay cambios en el guiín, pero el coraje que demostraron los futbolistas fue enorme".
"Mi única preocupación llegó cuando encajamos un gol tan tarde, los chicos pudieron quedar desconsolados a partir de ese momento, pero yo sabía que podíamos acabar igual de fuertes. Era solo una cuestión de aprovechar la oportunidad cuando se presentase, y lo hicimos. Estoy muy orgulloso de ellos".
"Se que todo el país lo celebrará esta noche. El fútbol es un gran juego, el más grande del mundo".
Uli Stielike (Fuente: afcasiancup.com): "No estoy de acuerdo en que no somos campeones. Es verdad que no tenemos la copa, pero nuestros jugadores son campeones. En sus corazones, en una gran cantidad de mensajes que han recibido después del partido, todo el mundo está dando la mano a los futbolistas".
"Fue un partido en el que la victoria pudo caer de uno u otro lado. Lo más justo hubiese sido un empate y que cada equipo se hubiese llevado la copa dos años a casa".
"Hoy ha sido el mejor partido si hablamos de sensaciones, cuando juegas contra 76000 personas y algunos futbolistas no han jugado nunca en ese ambiente, pero el lenguaje corporal fue el mejor. No hubo diferencia entre el equipo local y el visitante, fuimos muy agresivos y tuvimos un gran espíritu".
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