Análisis de partidos: Barcelona 2-1 Real Madrid

1. Contexto y datos del partido

Jornada 28 de la Liga BBVA: Barcelona 2 (Mathieu, Luis Suárez) - Real Madrid 1 (Cristiano Ronaldo)

El Barcelona llegaba al gran partido de la temporada en la liga española en su mejor momento del curso. Con más o menos continuidad, el 2015 culé ha estado definido por una idea, y el once titular ha sido definido. Salvo el tropezón frente al Málaga hace un mes, los de Luis Enrique llegaban al enfrentamiento contra el Real Madrid tras ganar 17 de 18 partidos. Un conjunto blanco que visitaba el Camp Nou en una dinámica radicalmente opuesta. Llegaban tras ganar frente al Levante por 2-0 en su último partido oficial, pero antes de eso, los de Ancelotti habían empatado frente al Villarreal, y perdido contra Athletic Club y Schalke 04.

2. Planteamientos

No hubo sorpresas en los onces de ninguno de los dos equipos. El Barcelona llegaba con la duda de Sergio Busquets, que finalmente fue suplente. Luis Enrique formó con el habitual 4-3-3 que se ha asentado en esta segunda mitad del curso, con la única variación de la titularidad de Mathieu por el de Sabadell. Bravo jugó bajo palos, con Dani Alves como lateral derecho y Jordi Alba como lateral izquierdo. En el centro de la defensa, Gerard Piqué y Jérémy Mathieu. En medio campo, Mascherano jugó como pivote, con Rakitic -derecha- e Iniesta -izquierda- como pareja de interiores. Por delante, Messi partía desde el perfil derecho, con Neymar en la izquierda, y Luis Suárez como delantero centro.

Tampoco sorprendió Carlo Ancelotti, que salió con su once habitual -con la baja de James Rodríguez-. El Real Madrid salió con un 4-4-2 más marcado que recientemente, aunque la posición de Bale lo iba modificando. Casillas en portería, con Carvajal en derecha y Marcelo en izquierda, y pareja de centrales para Pepe y Sergio Ramos. En medio campo, Kroos fue el pivote, con Modric como interior derecho e Isco como interior izquierdo. Arriba, Bale jugó en derecha, retrasando su posición para tapar la banda, mientras que Cristiano, el hombre de la izquierda, quedaba más suelto. Benzema jugó como delantero centro. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El primer tiempo arrancó con el Barcelona tratando de instalarse en campo rival. Los culés llegaban un escalón por encima a nivel emocional -le habían arrebatado al conjunto blanco el liderato de la liga recientemente- y probablemente eso se notó en la actitud de todo el bloque, que trató de meterse en masa en el campo del Real Madrid. Sin embargo, el dominio del partido se iba a establecer, de forma evidente, del lado blanco. Carlo Ancelotti sitúo su defensa a baja altura, con Isco y Marcelo vigiliando las recepciones de Messi, y Carvajal y Bale haciendo lo propio con Neymar. Además, Isco y Bale quedaban a medio camino para interceptar el pase a Iniesta y a Rakitic. Por dibujarlo sobre el papel, el Madrid defendía en un 4-4-2, y lo hacía de forma pasiva, protegiendo el espacio y sin la intención de robar, sino de incitar a la pérdida. El Barça tenía el balón en los pies de Mascherano, Rakitic o Iniesta, pero nunca logró dar un pase claro, ni hacia el exterior, ni a la espalda de Kroos. El alemán, además, hizo un primer tiempo soberbio, eligiendo cuando ser más agresivo para anticipar la posible recepción culé. Una vez el Real Madrid tenía la pelota en sus pies, dejó 20 minutos de un nivel impresionante. Marcelo, Modric y Benzema mostraron una finura tremenda, y con tres futbolistas de tal precisión y agilidad acertados de forma tan constante, el Real Madrid desbordó por completo al Barcelona. El balón parado (la titularidad de Mathieu sumó en ese sentido) permitió al Barça ponerse por delante, pero ese torrente de juego blanco provocó varias ocasiones claras antes de terminarse el primer tiempo, que llevaron a los de Ancelotti a empatar el duelo.

En el segundo acto, las sensaciones eran idénticas -el Real Madrid cazó un buen remate de Benzema que detuvo Bravo-, pero el 2-1 cambió radicalmente la dinámica del partido. Lo hizo Luis Suárez, gracias a un balón al espacio que logró recibir en la espalda de Ramos y Pepe. El delantero uruguayo jugó un partido descomunal, manteniendo una pelea constante con los dos centrales blancos. El Barça del primer tiempo no tenía un pase claro para avanzar, y la luz del 9 fue decisiva para quedar de cara en campo rival, o sacar faltas cerca del área de Casillas, donde el bajo nivel del portero blanco acrecentó el peligro culé. Ese gol cambió la actitud defensiva del Real Madrid -comenzó a meter el pie con mucha más frecuencia en lugar de tratar de dominar el espacio- y también aceleró sus intenciones con balón. 

El Real Madrid dejó de ser tan preciso en las salidas a campo rival, dejó de dar ese pase de más que atraía a un culé y le dejaba fuera de la jugada, y la última media hora de partido resultó una constante opción de contragolpe para el Barcelona, que cortaba esos envíos arriesgados del Real, y se desplegaba con una velocidad tremenda. Mientras que en el primer tiempo Messi no pudo correr en ventaja, en el segundo esos robos encontraban a Leo en posiciones centradas, dispuesto para iniciar la carrera, momento a partir del cual toda la zaga blanca quedaba completamente desbordada por la precisión del astro argentino. Lo lógico, dadas las circunstancias, era un tercer gol del Barça, pero alguna mala decisión de Neymar, y un remate errado de Messi, significaron que finalmente el marcador acabase en 2-1. En resumen, una parte de dominio para cada equipo. En la primera, el Real Madrid demostró que si su plan de juego es ejecutado con seguridad, resulta muy complicado contestarle, pero en el segundo, en el que dudó sobre su forma de defender, y arriesgó con demasiada frecuencia el pase, le permitió al Barcelona darle espacio para conducir a Messi, escenario en el que domina frente a cualquier rival.

4. Reacciones de los protagonistas

Luis Enrique (Fuente: AS): "Dentro de lo que es un partido de fútbol, hay diferentes fases y diferentes momentos dentro del partido. Nuestra idea de planteamiento era la misma. Nos ha costado en la primera parte porque el Madrid ha tenido el balón y se acercó con peligrosidad. La segunda ha empezado mejor para nosotros. El 2-1 nos ha dado mucha tranquilidad y luego hemos tenido infinidad de ocasiones. Son dos de los mejores equipos del mundo y dos de los de más pegada. Es una victoria bonita porque es ante nuestro eterno rival. Es importante para la Liga pero en ningún caso decisiva."

“Independientemente del posicionamiento de Leo, hay que equilibrar sus movimientos porque tienen libertad y eso lo hacen Rakitic y Daniel Alves. En la primera parte había muchos jugadores detrás del balón. Pero creo que hicimos pese a todo una buena primera parte”

“Luis Suárez ha hecho una segunda parte muy buena. Como la primera. Para eso pagamos lo que pagamos por Suárez. Contentos de que sea un jugador determinante. Estábamos contentos desde que llegó por su compromiso y por lo que le da al equipo. Creo que también me pronuncié hace tiempo. No es sólo un delantero centro a la antigua usanza sino ue se asocia bien. es un rematador, un jugador que necesita pocas cosas para finalizar y tiene un físico que nos viene bien”.

Carlo Ancelotti (Fuente: AS): "Se han enfrentado dos equipos de muy alto nivel. Por nuestro juego, creo que lo hemos hecho muy bien durante una hora. Hasta el segundo gol. Luego el partido se ha complicado mucho. En la primera parte del partido lo hicimos muy bien. Hemos estado muy sólidos atrás pero nos ha faltado concretar. Hemos hecho una hora muy bien y treinta minutos no tanto”.

“Hemos hecho bien el partido, ahora tenemos que seguir con esta idea. El equipo ha mejorado mucho pero la Liga está complicada. El Barça tiene ventaja pero no podemos bajar los brazos. Sobre todo porque lo bueno que hemos hecho en la primera parte tenemos que seguir”.

Pregunta: ¿Han jugado mejor por utilizar un 4-4-2 más claro con Bale ayudando en defensa? "Hemos jugado como siempre. No siempre lo hacemos pero intentamos poner dos líneas de cuatro. Bale se ha retrasado porque Alba ha empujado mucho y luego tratábamos de empujar".

 “Creo que no era un problema físico y sí de cabeza. No teníamos la misma idea del juego que al principio del partido. Los últimos 30 minutos no salieron como la primera parte”.