viernes, 6 de febrero de 2015

Modestos, hagan juego

Paulo Dybala, Palermo.


Se viven tiempos difíciles en el fútbol italiano. Nadie es capaz de hacer sombra a una Juventus que va camino de lograr su cuarto Scudetto consecutivo, aunque quizá lo más destacable desde un punto de vista negativo es que Inter o Milan, grandes gigantes del fútbol europeo, no solo viven malos momentos en términos de resultados, si no que además transmiten, semana tras semana, pésimas sensaciones a nivel de juego. Sin embargo, no todos son malas noticias en la Serie A, ya que hay clubes con menos recursos sacando el máximo partido de ellos.


Empoli Football Club

El conjunto toscano era uno de los principales candidatos al descenso antes de iniciarse la temporada -probablemente el principal junto al Cesena-, pero a día de hoy a logrado cambiar esa percepción: candidato, sí, principal, no. El conjunto dirigido por Maurizio Sarri ocupa, tras 21 jornadas, el 16º puesto. Es cierto que el Empoli no gana en Serie A desde el 23 de noviembre, pero también lo es que desde esa fecha (9 jornadas) solo ha perdido dos partidos.

Once tipo Empoli 2014/2015

Maurizio Sarri (Napoli, 10/01/1959) es el téncico del Empoli desde la temporada 2012/2013. Desde comienzos de los años 90 ha entrenado a clubes de las categorías inferiores del Calcio, primero como hobby, después de forma profesional, hasta que, muy poco a poco, ha llegado a asomar la cabeza por la Serie A. Su Empoli es un equipo difícil de batir, pero lejos de la imagen de típico club pequeño que acumula mucha gente cerca de su área para defenderse. 

El conjunto toscano, para situarnos, juega con un sistema 4-3-1-2. Quizá el mayor aliciente del trabajo de Sarri esté en la línea defensiva, aunque, evidentemente, haya que referirse a todo el bloque como partícipe del buen rendimiento del equipo en esta fase. La portería es para Luigi Sepe. Canterano del Napoli,  lleva varias cesiones, siendo esta la de su explosión definitiva. Otro de los tantos jóvenes porteros italianos incipientes que hay en este momento, está cuajando una gran temporada. Los laterales son para Hysaj y Mário Rui, de perfil similar -recorrido y cierta agilidad-, es el albanés quien está causando muy grata impresión. Lo mejor de la línea defensiva es su pareja de centrales: Tonelli y Rugani. Tonelli ses más rígido, muy bueno en el juego aéreo y poderoso en los choques, mientras que Rugani -que también va bien por arriba- es el que suele salir más largo a los cruces. El Empoli defiende con el bloque a una altura media, y los cuatro defensas se mueven como una bandada de pájaros: el gran valor de su línea defensiva es la tremenda armonía a la hora de acompañar la presión de sus compañeros, tirar el fuera de juego, o bascular para cerrar espacios. Se trata del gran recurso competitivo del conjunto toscano, e incluso, aportando en el plano ofensivo, puesto que su pareja de centrales suma 6 goles.

En medio campo, Valdifiori -el pivote-, Vecino -interior derecho- y Croce -interior izquierdo- forman un trío de mucho trabajo. No son brillantes ni imaginativos con balón, y su principal tarea es hacer de tapón para que los pasadores rivales no encuentren ese espacio que queda a la espalda de la línea defensiva. A partir de ahí, la intención es robar y salir con verticalidad. El conductor de esa tarea ha venido siendo, en el primer tramo de la temporada, Simone Verdi. El canterano del Milan es un jugador rápido y vertical, aunque mejor tirando desmarques largos que conduciendo esos contragolpes. Por eso ha tenido opciones Zielinski, un futbolista menos explosivo pero más preciso. La incorporación clave, y que casa perfectamente con las necesidades, ha sido Saponara. Sin continuidad en el Milan, regresa a casa para cumplir un papel en el que creció enormemente como futbolista. En punta, son varias las alternativas. Por un lado, la dupla Tavano-Maccarone. Aportan intuición y gran lectura, aunque quizá se esté notando que ya no están en plenitud física para competir con defensas de primer nivel, como muestrasn sus cifras goleadoras (2 y 3 tantos). Las alternativas son buenas: Pucciarelli, un segundo punta con gran regate y muy móvil, y Mchedlidze, un 9 clásico, más referencia, capaz de ganar choques y ofrecer soluciones distintas. En resumen, hablamos de un equipo al que le falta algo de calidad global (Rugani y Saponara son los de más nivel), pero muy bien trabajado.


Unione Sportiva Sassuolo Calcio

Proyecto cada vez más estable, arropado por la inyección económica de la Mapei de Giorgio Squinzi. El conjunto de Modena logró salvar una mala primera vuelta la temporada pasada, y cada vez está más asentado en la élite: tiene un plan de juego bien desarrollado, y jugadores cada vez más codiciados por clubes de mayor entidad dentro del fútbol italiano. Actualmente son 10º, con 28 puntos en el casillero.


Once tipo Sassuolo 2014/2015

Eusebio Di Francesco (Pescara, 08/09/1969) es entrenador del Sassuolo desde la temporada 2012/2013. De su mano, el club ascendió a la Serie A, pero una mala primera vuelta del curso pasado significó su destitución, en el mes de enero de 2014. Sin embargo, Alberto Malesani, su sustituto, no pudo enderezar la situación, y fue reclamado de nuevo para tratar de salvar al equipo, logrando el objetivo.

El sistema base de este Sassuolo es el 4-3-3, aunque en algunos partidos, de forma puntual, ha pasado a la defensa de cinco, como para enfrentarse a la Juventus. La portería es para uno de los fichajes importantes de la temporada; Andrea Consigli, que se está confirmando en lo que se esperaba: un guardameta decisivo y sobrio. No está ocurriendo lo mismo con el croata Vrsaljko, que llegaba como una incorporación de peso y no está terminando de rendir, rotándose en el lateral diestro con Gazzola. En el lateral izquierdo sí está afianzado Peluso, que además tiene un recambio de garantías como Longhi. En el centro de la defensa, la teórica pareja titular debería de ser Terranova-Paolo Cannavaro, aunque el primero acaba de sufrir una grave lesión de rodilla. La alternativa es Acerbi, un central potente en los choques y en el juego aéreo, aunque algo lento para girar y cubrir distancias más largas. Las características de su línea defensiva hacen que estemos viendo la versión más sólida del Sassuolo con un bloque a baja altura (esto no significa que esquiven la presión adelantada en algunos momentos), pero sí es cierto que, entre que los defensas son mejores cerca de su área, y que los puntas explotan sus mejores recursos a campo abierto, la mejor versión del equipo la vemos junto en campo propio y saliendo con velocidad.

El hombre que hace de ancla en medio campo es Magnanelli, con un primer pase bastante decente y buena lectura para ejercer el papel de mediocentro. A su lado, como interiores, hay variantes de distinto perfil. Missiroli es el más indiscutible, de un corte mixto. En etapas anteriores ha sido un jugador de ataque, pero ahora se ha adaptado a hacer también ayudas defensivas, y mantiene su buen pie para construir jugadas ofensivas. A su lado, suelen entrar Biondini -un jugador de enorme trabajo y mucho recorrido-, o Brighi, mientras que el hombre de perfil parecido, al menos a la hora de construir, que puede entrar por él, es el argelino Taïder. Toda una estructura para potenciar lo que realmente es determinante en este equipo: su tridente ofensivo. Indiscutibles son Berardi, Zaza y Sansone. Berardi está algo más apagado con respecto a su primera vuelta del curso pasado, pero hablamos de un jugador con una proyección tremenda. Zurdo, juega en derecha y hace de su potentísima diagonal -con y sin balón- su mejor recurso ofensivo. Implicado en banda, quizá le falta templar algo más los ánimos en momentos puntuales. En el otro perfil; Nicola Sansone. Diestro, la conducción y el desborde son sus mejores argumentos, además de su buen golpeo para terminar jugadas. El tercer hombre de ataque es Zaza, que ya ha sido internacional absoluto de la mano de Antonio Conte. Zaza no es precisión, pero sí constancia al máximo. Trabaja en la presión, no para de ofrecer alternativas a sus compañeros, y hace de punto de apoyo para las transiciones ofensivas. Un jugador completísimo, que suma 8 goles en esta primera mitad de campeonato. En definitiva, el Sassuolo potencia muy bien a sus tres hombres ofensivos, que son de gran calidad, y lo hace estando bien equilibrado con el resto del equipo, lo que explica su gran rendimiento hasta el momento.


Unione Sportiva Città di Parlemo

Recién ascendido, sus 30 puntos tras 21 jornadas le sitúan en un fantástico 7º puesto. Absolutamente sorprendente viendo su inicio de campaña, en el que sumaba 6 puntos tras 8 jornadas. Desde entonces, un solo partido perdido. Es especialmente reseñable que la buena dinámica llegase acompañada de la continuidad de su entrenador, teniendo en cuenta la fama -más que ganada- que tiene Zamparini de despedir sin piedad a sus técnicos. 


Once tipo Palermo 2014/2015

Giuseppe Iachini (Ascoli, 07/05/1964) es entrenador del Palermo desde septiembre de 2013, cuando llegó al club para sustituir a Gennaro Gattuso. Iachini ya había ascendido a Serie A a Brescia, Chievo Verona y Sampdoria, y volvió a hacerlo el curso pasado con el conjunto rosanero. Esta temporada, a pesar del mal arranque, el técnico marchese ha conseguido no solo encauzar la situación, también alcanzar un rendimiento sobresaliente.

El sistema del Palermo es un 5-4-1, con un rombo en medio campo. Sorrentino es indiscutible en portería, con experiencia en Serie A, es uno de los porteros más sobrios de la categoría. La línea defensiva ha sido la que más dudas ha causado -hasta encontrar la armonía- en la primera mitad de la temporada. Podemos decir que el trío de centrales titular, y con el que el club siciliano ha alcanzado su mejor rendimiento, ha sido el formado por Ezequiel Muñoz, Giancarlo González, y Sinisa Andelkovic. El costarricense González está rindiendo muy bien en su posición de líbero, en la que ya fue utilizado por Jorge Luis Pinto en el Mundial. Buena salida de balón, anticipación, y defensa dentro del área. Muñoz y Andelkovic eran dos fantásticos complementos, pero el argentino ha salido a la Sampdoria en este mercado invernal. De momento está entrando Vitiello, aunque parece una ausencia difícil de llenar. La gran ventaja del trío titular es que podían responder bien a distintos tipos de defensas, con los dos centrales exteriores cruzando bien y resistiendo enfrentamientos contra puntas veloces, pero también teniendo contundencia en defensas más estáticas. Ha sido una de las claves de este buen rendimiento del Palermo.

En medio campo, la inclusión en el once de Enzo Maresca también ha sido clave. El ex futbolista del Sevilla está jugando en un papel más reservado de lo que ha sido habitual a lo largo de su carrera: como mediocentro es el primer receptor de los pases desde la defensa, y está demostrando muy buena lectura para hacer ayudas defensivas. Su entrada ha llevado a Rigoni a la posición de interior derecho, mientras que Barreto está ocupando el perfil izquierdo. Esto ha significado un medio campo de mucho trabajo y buena lectura a nivel global. A principio de curso vimos en alguna ocasión a Franco Vázquez como interior, en una versión más ofensiva, pero el Palermo estable y equilibrado ha llegado con este medio campo. En bandas, dos jugadores de muchísimo recorrido: Morganella y Lazaar. Son prácticamente la única aportación exterior del equipo, por lo que su papel es importante. Sin embargo, los dos elementos de desequilibrio real, y que están permitiendo al equipo siciliano alcanzar esa posición en la tabla, son los dos hombres más adelantados. Por un lado, Franco Vázquez es el nexo constante en las transiciones al ataque. Es el jugador más preciso y con más visión de juego para hacer de lanzador, e incluso está haciendo goles importantes. Por delante de él, la joya de la corona: Paulo Dybala. Juega como hombre más adelantado, pero no es un 9 referencia. Se mueve por todo el frente de ataque, da continuidad a las acciones, tiene capacidad de desborde, y facilidad para hacer gol. Son ya 11 tantos los que lleva en esta Serie A la mayor promesa de todo el fútbol italiano. Como tercera opción, Belotti. Un 9 capaz de rematar en el área, pero con velocidad y cuerpo como para hacer productivos envíos a los espacios. El sub 21 italiano es una fantástica alternativa. En definitiva, este Palermo es un equipo que ha mostrado recursos distintos en defensa, experiencia y equilibrio en medio campo, y una capacidad de resolución en el tercio final digna de un equipo que pelee por puestos europeos. 

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